¿Qué es el Sindrome de Vejiga Hiperactiva?
- Publicado en Adultos Jóvenes
Si siente una necesidad urgente y repentina de orinar, difícil de controlar o posponer; o sufre de incontinencia urinaria , que es la pérdida involuntaria de orina inmediatamente después de la necesidad urgente de orinar; orina más de ocho veces al día e incluso se despierta tres o más veces durante la noche para vaciar su vejiga; es posible que usted padezca de Síndrome de Vejiga Hiperactiva.
Si bien la vejiga hiperactiva es frecuente en los adultos mayores, no forma parte del proceso normal de envejecimiento. Por ello, tener vejiga hiperactiva es una condición que puede afectar la calidad de vida de las personas, sin importar la edad. Muchas pueden sentirse avergonzadas, aislarse e, incluso, llegar a limitar su vida laboral y social. Ahora, es importante que usted sepa que una breve evaluación puede determinar si los síntomas tienen una causa específica y comenzar de inmediato su tratamiento.
SaludChiriqui.com conversó con la uroginecóloga Roxana Salcedo sobre sus causas y opciones de manejo.
“Si los síntomas provocan angustia o afectan la cotidianidad, es necesario una consulta al especialista. Existen diversos tratamientos para esta condición. Hablar sobre un tema tan privado puede no resultar fácil, pero vale la pena arriesgarse, en especial si los síntomas alteran la jornada laboral, las interacciones sociales y las actividades cotidianas. Asimismo, puede tener un impacto emocional. La persona puede padecer de depresión, ansiedad, alteraciones del sueño y problemas de sexualidad”, exhorta.
“El tratamiento de la vejiga hiperactiva suele comenzar con estrategias de conducta, como cronogramas para beber líquidos, horarios para orinar y técnicas de contención de la vejiga utilizando los músculos del suelo pélvico. Si estas estrategias iniciales no son suficientes para controlar los síntomas, será necesario recetar algunos medicamentos”, explica.
Causas y factores de riesgo
De acuerdo con la doctora Salcedo, las causas de la vejiga hiperactiva con orgánicas. Los riñones producen orina que va hacia la vejiga. Al orinar, la orina sale por una abertura ubicada en la parte inferior de la vejiga y fluye hacia el exterior por un tubo denominado uretra.
Cuando la vejiga se llena, las señales nerviosas enviadas al cerebro finalmente desencadenan la necesidad de orinar. Al orinar, las señales nerviosas coordinan la relajación de los músculos del suelo pélvico y los músculos de la uretra (músculos del esfínter urinario). Los músculos de la vejiga se tensan (contraen) y, de este modo, expulsan la orina hacia afuera.
Hablamos de vejiga hiperactiva cuando los músculos de la vejiga comienzan a contraerse involuntariamente aunque el volumen de orina almacenado en la vejiga sea bajo. Esta contracción involuntaria genera la necesidad urgente de orinar.
Según la uroginecóloga, existen diversas afecciones que pueden contribuir a causar los signos y síntomas de la vejiga hiperactiva:
- Trastornos neurológicos, como los accidentes cerebrovasculares y la esclerosis múltiple
- Diabetes
- Medicamentos que causan un aumento rápido en la producción de orina o que deben tomarse con mucho líquido
- Infecciones agudas de las vías urinarias que pueden ocasionar síntomas similares a los de la vejiga hiperactiva
- Anomalías en la vejiga, como tumores o cálculos
- Factores que obstruyen la salida de la vejiga: agrandamiento de la próstata, estreñimiento o cirugías anteriores para tratar otros tipos de incontinencia
- Consumo excesivo de cafeína o alcohol
- Deterioro de la función cognitiva debido al envejecimiento, que puede impedir que la vejiga interprete correctamente las señales enviadas por el cerebro
- Dificultades para caminar, que pueden generar urgencia urinaria si no puede llegar al baño rápidamente
- Vaciamiento incompleto de la vejiga, que puede ocasionar síntomas de vejiga hiperactiva al quedar poco espacio para almacenar orina
“Es importante saber que la causa específica de la vejiga hiperactiva también puede desconocerse”, comenta.
Prevención y diagnóstico
La Dra. Salcedo enfatiza en la prevención. Mantener un peso saludable, realizar actividad física y ejercicio diariamente con regularidad, reducir el consumo de cafeína y alcohol, no fumar, controlar las enfermedades crónicas, aprender dónde están ubicados los músculos del suelo pélvico y fortalecerlos mediante la realización de los ejercicios de Kegel, son algunas recomendación de profilaxis.
Para un diagnóstico, el médico solicitará exámenes para descartar infecciones y otras pruebas orientadas a medir qué tanto se vacía la vejiga al orinar y la fuerza del flujo o chorro de orina, así como para determinar si existe causa específica.
El tratamiento es personalizado y dependerá de las causas y qué tan severa es la condición.