Panamá se ha convertido en el primer país de Centroamérica en prohibir el uso de bolsas de polietileno, uno de los tantos tipos de plásticos existentes en el mercado. El pasado 20 de julio, fue el último día en el que los establecimientos comerciales del país ofrecieron a sus clientes bolsas o cartuchos de este tipo, con sus compras.

La Ley No. 1 de 2018 empezó a regir el pasado sábado en supermercados, minisúper, abarroterías y comercios minoristas. En enero de 2020, esta regulación se ampliará a almacenes y mayoristas. La iniciativa incluye promover el uso de cartuchos reutilizables.

Esta iniciativa, al igual que las muchas y diversas que ya están en marcha América Latina y Europa, responden a la necesidad de reducir el impacto que el plástico tiene sobre el medio ambiente. Un informe de los especialistas de la Comisión Europea concluyó que el 80% de la basura en los océanos del mundo es plástica, debido a su lenta descomposición del polietileno. Se estima que una bolsa o cartucho de plástico puede tardar al menos 100 años en degradarse.

La prohibición de las bolsas se une a iniciativas de organizaciones sin fines de lucro, para la reducción del uso de carrizos.

Ahora, este compuesto químico también es nocivo para los seres humanos. ¿Sabe usted qué tan dañinas son para tu salud?

Aunque los efectos del plástico sobre la salud aún están siendo estudiados, ya existen algunos indicios de sus posibles efectos nocivos.

Se dice que puede afectar la salud de personas que tienen alergias como rinitis u problemas bronquiales crónicos. También afecta a las personas que manipulan el plástico, como los mismos vendedores callejeros. Lo dañino es cuando al plástico se adhieren otras sustancias como el polvo, la tierra, etcétera.

Hay ciertos químicos que se utilizan en la fabricación del plástico que pueden ser alergénicos para algunos pacientes y producir alergias nasales, alergias cutáneas o exacerbación de episodios de asma. Cabe destacar que esto no ocurre en todos los pacientes propensos a alergias, ya que el plástico, incluso, se utiliza para evitar la acumulación de ácaros en los colchones. 

Algunos documentos en internet, se refieren a los riesgos de la bioacumulación y el riesgo de esta en nuestra mesa. La acumulación de bolsas plásticas y otros productos de este material en los océanos, por ejemplo, conlleva a lo que se llama bioacumulación. Los peces más pequeños van comiéndose los microplásticos y se van acumulando dentro de ellos, mientras se desarrolla la cadena trófica, que es la transferencia de energía alimenticia a través de organismos, hasta llegar a nuestros platos en nuestras casas. 

Asimismo, respecto al uso de bolsas para almacenar la comida dentro de la nevera, se sugiere más bien el uso de envases o bolsas de plástico libres de BPA, que es una sustancia química tóxica. 

Es importante reconocer los efectos de este material de uso cotidiano. En nuestras compras diarias, es común que acumulemos gran cantidad de bolsas plásticas, lo cual se agrava con los años. Aún estamos a tiempo de pensar si esa es la mejor alternativa para cuidar el medio ambiente.